sábado, 4 de mayo de 2013

Mi ángel, nuestro ángel

Hace ya un año que viví el día más triste de mi vida. Un día que nunca olvidaré, que por mucho tiempo que pase, cuando vuelve a mi mente se me encoge el corazón, me duele el alma.
No hay día que no te recuerde. No hay día que pase sin imaginar cómo sería mi vida si hubieras seguido en mi interior. Si hubieras tenido fuerzas para seguir con nosotros. Pero las cosas pasan por algo, y si pasó así fue porque tu objetivo era protegernos siempre allí donde estés.

Hace un año papá te dedicó las palabras más bonitas y sinceras que he leido nunca:

"A veces un pequeño detalle, una nimiedad, un mínimo descontrol te cambia la vida para siempre.La noticia de que llegabas nos vino de sorpresa, no te esperábamos, mentiría si te dijera que te buscamos. Pero ahí estabas.
La incredulidad del principio pasó a la incertidumbre, a los nervios, a los planes y, finalmente, a la ilusión. La ilusión de tenerte y quererte. La ilusión de estar los 4 juntos desde que llegaras.
Y ahora te has ido. Y por mucho que le demos vueltas y vueltas jamás sabremos como ni porqué. Lo único seguro es que te has ido para siempre.
Desde que soy padre, el único temor que tengo en mi vida es perder a mi hijo. Ahora ese temor ya se ha cumplido.
Hace mucho tiempo que no creo en dios ni en nada que se le parezca, pero si creyera pensaría que ha de ser un dios muy hijo de puta para hacerle esto a la buena gente. Nunca sabremos si hubieses sido niño o niña, si hubieses sido rubio o moreno, alto o bajo. Nunca sabremos nada de ti….Lo que sí sabemos es que mamá y papá siempre se acordarán de ti. Siempre
Te queremos"

Gracias por hacerme fuerte. Gracias por enseñarme tantas cosas. Gracias por seguir a mi lado. Gracias por protegerme, por protegernos.


 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario